Grupo de estudiantes del CEM puso en marcha su iniciativa de acompañamiento a las niñas residentes en el Hogar Faro de Luz y Esperanza.
En el Hogar Faro de Luz y Esperanza, dependiente de la Corporación Metodista, residen 12 niñas, de entre 6 y 16 años, derivadas por el Tribunal de Familia de Coronel en el marco del proyecto de Centros Residenciales de Protección del Servicio Nacional de Menores (SENAME).
Un grupo de estudiantes del Centro Educacional de la Madera (CEM), de Coronel, participantes en el Programa “Deja tu huella: Incubadora de iniciativas de participación ciudadana juvenil”, escogió dicho Hogar como espacio para desarrollar su proyecto de voluntariado de acompañamiento a las niñas residentes, mediante actividades recreativo-educativas realizadas en encuentros de 2 horas realizados cada sábado, entre septiembre y comienzos de diciembre de 2016.
El sábado 3 se septiembre, un grupo de 10 estudiantes (7 mujeres y 3 hombres), acompañados de las profesionales Elizabeth Aguilera y Pamela Escobar, Encargadas Territoriales de SEPADE en el CEM y su entorno, realizaron el primer encuentro. La actividad partió con la presentación individual de las y los estudiantes y de las niñas residente en el Hogar. Se les contó brevemente el objetivo de los encuentros, seguido por juegos al aire libre, dinámicas, una sesión de “pinta caritas” que las niñas disfrutaron mucho, especialmente las más pequeñas, cerrándose con un once compartida, con torta y jugos.
En esta primera oportunidad estuvo presente la mitad de las niñas residentes, ya que la otra mitad se encontraba de visita en sus hogares familiares, en algunos casos en el marco del proceso de reinserción en el grupo familiar. La actividad resultó altamente motivadora tanto para los y las estudiantes voluntarios, como para las niñas, y fue muy valorada por el personal del Hogar, que colaboró activamente.
El programa “Deja tu huella” es una de las actividades centrales del proyecto “En la confianza no está el peligro: Jóvenes del Biobío construyen proyectos de vida”, ejecutado por SEPADE, con co-financiamiento de la agencia de cooperación alemana “Pan para el Mundo: Servicio Protestante para el Desarrollo”, en los tres liceos técnico-profesionales gestionados por su Fundación EDUCADES.